sábado, 14 de septiembre de 2013

Lucia Fernández Núñez


Mi nombre y yo somos un pretérito imperfecto, en presente continuo, del verbo lucir...Lucía, inocente de toda culpa puesto que nací en Cádiz, un 28 de diciembre de hace 46 años. Maestra casualmente pero rápidamente caí rendida ante la magia de la docencia. No soy poeta, nunca he publicado nada, pero sé que la poesía me busca y he decidido salir a su encuentro. Y a encontrarme con vosotros voy.


LUNA LLENA

¿De qué estás llena, Luna?
¿De espuma, de sal o de miga de pan?
¿De besos, de rezos, de adioses eternos?
¿De sueños, de retos, de futuros inciertos?
¿De todo, de nada, de amor inmortal?
Luna, cómplice fiel,
incansable lienzo imborrable
donde grabados quedaron
los secretos que guardo.


A CARA DESCUBIERTA

Caigo sobre la noche...
me desarmo ante ella...
mis toallitas desmaquilladoras
comienzan a actuar,
llevándose la sonrisa
que en mi cara dibujó la barra de labios
y ese toque de color que adornaba mis mejillas...
mis ojos se hacen de nuevo pequeños
cuando mis pestañas se despojan
de la máscara que les daba volumen
y la rayas que los demarcaban se pierden sin más...

La sombra de ojos
se oculta entre mis sombras
que una vez más han de enfrentarse
con mis luces
cuando solo quedamos ellas y yo...

Caigo sobre la noche a cara descubierta
y ella me mira como mira la Gioconda...
con esa media sonrisa ,
mitad misteriosa, mitad tierna,
que atrapa al visitante del Louvre...

Así me recibe la noche
y me arropa una vez más
con su canto suave.


BERSOS CON B

Una vez por semana
se abandona a la lucha cuerpo a cuerpo,
la única en la que los dos contrincantes
pueden ganar.

Y besa...y toca...
y susurra...y provoca...
se deja llevar,
se deja hacer.
Cada uno de sus poros despierta
y ella se sabe mujer.

Y acaba el sueño,
la realidad comienza,
la magia termina
al final de la cama.

Y cierra los ojos
y lo ve...a él...
al que cada mañana
regala bersos con b,
a quien solo es palabras
que erizan la piel...
a quien ni besa...ni toca....
ni susurra...ni provoca
pero está...
en la ventana,
en la taza del café
y en el café.

El poeta de los bersos con b,
que ni besa...ni toca...
ni susurra...ni provoca...
pero lanza besos al aire
cuando envía versos al alba.

El que cada noche,
con luna o sin ella,
teje versos con besos
y le hace un collar invisible
que acaricie su cuello...
el collar invisible
de los bersos con b.

5 comentarios:

  1. Oleeeee!
    si ya lo decía yo, que tenías que lanzarte a escribir :-)

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  2. ¿Sabes Lucía? me emocionas. Lo consigues simplemente porque hay en tus versos esa verdad del alma, esa desnudez que necesito como lectora para que una poesía me cautive; para que se me vaya al interior formando parte de mí misma.Creer en la palabra es para mí indispensable. No hay ademanes, ni pretensiones en tus escritos, ni apuestas por florituras; hay tan solo alma y piel de mujer...brazos extendidos...ojos cerrados...

    Qué fácil es quererte amiga.

    Un beso.

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  3. Esa luna confidente, ese desnudar el alma ante la noche, esos bersos con b. Gracias por compartir.

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